Ser profesora de yoga es una bendición en la forma en que puedo ofrecer mis puntos de vista y la orientación a través de la alegría de los ritmos, respiración y meditación. Uno de mis principales objetivos dentro de cada práctica es llevar a los practicantes algunos puntos de inspiración o la comprensión de sí mismos que es relevante para ese momento, así como para el resto de sus días. Pero lo que se convierte en un momento profundo para mí en la clase es cuando realmente comienzan los estudiantes ha sentir su propia inspiración.
¿Qué es esta inspiración? Para mí, esto es cuando el estudiante ya no está siguiendo las instrucciones, ya no es pasivo, sino que compromete la propia experiencia y abraza los sentidos y las respuestas. Respeto mucho una de las filosofías básicas de las artes marciales que hace hincapié en el objetivo de que el estudiante se convierta voluntariamente en participante de su propia práctica, con experiencia suficiente y crecimiento personal dentro de ese arte que él / ella con el tiempo se convierte en su propio maestro.
Sólo asistir a una clase y plantearse realizar yoga no es yoga. Comprender la función de posturas, la respiración, los beneficios de una práctica completa, transformar el cuerpo, la mente y el alma es el yoga.
¿Cómo es de inspirador ver a estos estudiantes a adaptarse y explorar en sus posturas? ¡Qué hermoso es ver a un estudiante cambiar a una postura diferente debido a que el alumno está escuchando primero a su cuerpo en lugar de simplemente el ejercicio que estoy indicando. Estos estudiantes están encontrando su maestro interior, junto con las respuestas de vibración del Ser Interior. Se trata de encontrar la verdadera integridad de la postura, mientras explora el efecto que esta experiencia inmediata puede desempeñar en la vida cotidiana. Estos estudiantes están descubriendo la confianza para elegir lo que es adecuado para ellos en esa práctica y, de hecho, dándose el derecho a cuestionar / analizar las instrucciones que se ofrecen.
Sintonizar y conectar con su Maestro interior y permitir esta maravillosa guía para desarrollar su conciencia crítica. Realmente entender el cómo y el por qué de cada ejercicio de yoga, y dejar que su Maestro Interior, determine el objeto personal de ese ejercicio. Permitirse preguntas y sensaciones para llegar a la profundidad dentro de la práctica en lugar de existir en un estado pasivo.
Observar. Siente. Explorar.
